Los 9 problemas más comunes del automóvil
1. Luz de advertencia
Las luces de advertencia o de comprobación del motor son el problema más común para los propietarios de coches, camiones y SUV americanos. Estas luces se encienden cuando la ECU (Unidad de Control del Motor) del vehículo detecta un código de error activado por el sensor. Dado que hay más de 200 códigos de advertencia posibles, hacer que un mecánico profesional complete la inspección de las luces de advertencia es la mejor manera de determinar el origen y realizar la reparación correcta.
2. Un motor de pulverización
Cuando el aire y el combustible se mezclan y queman adecuadamente en la cámara de combustión, el motor funciona de forma óptima. Para completar eficazmente este proceso, muchos componentes del sistema de encendido y de combustible deben trabajar juntos. Aunque muchas piezas móviles contribuyen al funcionamiento normal del motor, uno de los principales problemas son las salpicaduras del motor o los fallos de encendido. Reducir los problemas de fallos de encendido o salpicaduras del motor.
3. Poco ahorro de combustible
Cuando el motor funciona de forma eficiente, quema el combustible a un ritmo que ayuda a mejorar el ahorro de combustible. Sin embargo, varios componentes del sistema de combustible, como el filtro de combustible, el filtro de aire, el sensor de flujo de masa de aire y el sensor de O2, acabarán ensuciándose o desgastándose. Si esto ocurre antes de la sustitución, hará que el motor consuma más combustible de lo habitual.
4. La batería está agotada o muerta
La mayoría de las baterías de los coches deberían durar unos tres años o 50.000 millas. La causa de una batería muerta suele ser el amperaje o la disminución de la corriente. A medida que la batería pierde su capacidad de mantener la carga, la corriente disminuirá de forma natural. Los alternadores dañados, los sensores de temperatura de la batería u otros componentes del sistema de carga pueden acelerar este problema. Lo mejor es sustituir la batería del coche cada 50.000 millas o tres años, aunque no muestre signos de daños.
5. Neumático pinchado
Aunque la mayoría de los neumáticos revientan tras golpear un objeto o ser pinchados, el simple desgaste puede ser la razón principal. Siga las recomendaciones del fabricante del vehículo para prolongar la vida de los neumáticos rotándolos correctamente. En general, la mejor recomendación es cambiar los neumáticos cada 8.000 kilómetros (o cuando se cambie el aceite del motor).
6. Sonido anormal o anómalo de los frenos
Al igual que cualquier otra pieza móvil de un coche, el sistema de frenos está diseñado para desgastarse en un periodo de tiempo determinado. Los frenos son esenciales para una frenada segura, por lo que cuando muestran cualquier signo de mal funcionamiento, como chirridos, chirridos o pedales de freno blandos, deben ser revisados por un mecánico profesional lo antes posible. Aunque los problemas menores pueden causar chirridos o chirridos, una vez que los frenos comienzan a chirriar, es una clara señal de que necesitan ser reemplazados.
7. Fallo del alternador
El alternador forma parte del vehículo y mantiene todos los sistemas eléctricos en funcionamiento tras el arranque del vehículo. También es responsable de cargar la batería para mantenerla en óptimas condiciones. Cuando el alternador falla, acaba provocando un desgaste prematuro de la batería y otros problemas de arranque.
8. Motor de arranque dañado
El motor de arranque es el responsable de hacer girar el motor para iniciar el proceso de arranque. Cuando este componente falla, suele deberse a daños en la válvula solenoide, a daños en el motor de arranque o a otros fallos eléctricos, como los relés de arranque. Aunque el motor de arranque puede ser sustituido antes de que se dañe, es difícil predecir cuándo ocurrirá esto. Lo mejor es comprobar primero el motor de arranque del coche para determinar el problema, y luego asumir que está arrancando el motor.
9. Desplazamiento del volante de inercia
Hay varios problemas que pueden hacer que el volante tiemble durante la conducción. Si esto ocurre inmediatamente después de arrancar el coche y empezar a conducir, la causa habitual es un daño en los cojinetes de las ruedas o en los componentes de la suspensión. Si ocurre a velocidades más altas, suele ser un problema de equilibrio de los neumáticos y las ruedas.
Espero que con estos prácticos consejos puedas distinguir de la manera mas oportuna algún problema en tu vehiculo.
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